
Disculpen, como dice Jorge Palmieri, los cuatro gatos que leen mis elucubraciones, soy un desempleado muy ocupado...jajajajaja no he encontrado tiempo en la última semana para sentarme y escribir algo sobre la muerte del malogrado "Rey del Pop".
Han corrido ríos de tinta sobre dicho tema y yo, que en mis tiempos de adolescente desenfrenado era admirador de Jackson me doy cuenta que de dicha admiración ha quedado lo mismo que de dicho desenfreno...nada.
Lo que más me ha llamado la atención es el hecho de que los medios recalquen tanto el tema del "éxito de Michael Jacson" y me digo: ¿éxito? ¿cuál éxito? si yo reconozco el éxito como el "incremento exponencial del estado de felicidad" el finado fue entonces un ser totalmente desdichado y una antítesis de lo que yo considero éxito.
Amasar una fortuna que nunca podrás disfrutar solo para ir degradando tu organismo y mente en un vorágine de autonegación; vivir confinado para el mundo como un ser cuasi humano sin llegar a serlo plenamente; para al final morir a una mediana edad cronológica pero seguramente una edad metabólica mucho mayor, disculpen amig@s, eso podrá ser muchas cosas...menos éxito.
Si en algo fue exitoso Jackson fue en demostrarle al mundo una vez más que fama, dinero, grandes logros materiales no son sinónimo de éxito si no van acompañadas de un sentimiento de autoaceptación, autoestima, felicidad de dar y compartir con el mundo los talentos que Dios te ha confiado y como siempre la Biblia en pocas palabras dice tanto..."tengan como si no tuvieran".
En una próxima entrada escribiré más sobre el tema del éxito y compartiré mi definición personal de éxito, definición que cada un@ debiera elaborar previo a acometer su propia búsqueda, entre tanto que bueno es volver a oír las rolas de los ochenta e intentar hacer aunque torpemente los famosos pasos de Micheal Jackson que antes me salían tan bien.
2 comentarios:
Les entrego, a mi pequeño parecer, una de las mejores respuestas que ubique en internet hace algun tiempo.
Tanto me gusto, que le puse un marco y la tengo en mi sala:
En la Revista PODER, de noviembre del 2002, el Mexicano Carlos Slim, el hombre más rico de América Latina respondió una pregunta, acerca del significado del éxito. Parece conveniente revisar la respuesta de este connotado empresario, sobre este interesante tema, en esta época de reflexión y paz.
Yo creo que el éxito no está en lo económico. Una persona no es de éxito porque le va bien en los negocios o le va bien profesionalmente o saca 10 en la escuela. Creo que eso es lo que menos vale. Lo que vale es tener los pies en la tierra, la familia – el concepto de familia, los amigos; apreciar las cosas que tienen valor verdadero, no solo material, no físico necesariamente. Pienso que a este concepto bien le puedo añadir una reflexión que me regaló mi madre:
El éxito no tiene que ver con lo que mucha gente se imagina. No se debe a los títulos nobles y académicos que tienes, ni a la sangre heredada o la escuela donde estudiaste. No se debe a las dimensiones de tu casa o de cuantos carros quepan en tu garaje. No se trata de si eres jefe o subordinado; o si eres miembro prominente de clubes sociales. No tiene que ver con el poder que ejerces o si eres un buen administrador o hablas bonito, o si las luces te siguen cuando lo haces. No es la tecnología que empleas. No se debe a la ropa que usas, ni a los grabados que mandas bordar en tu ropa, o si después de tu nombre pones las siglas deslumbrantes que definen tu estatus social. No se trata de si eres emprendedor, hablas varios idiomas, si eres atractivo, joven o viejo.
El éxito… se debe a cuánta gente te sonríe, a cuánta gente amas y cuántos admiran tu sinceridad y la sencillez de tu espíritu. Se trata de si te recuerdan cuando te vas. Se refiere a cuánta gente ayudas, a cuánta evitas dañar y si guardas o no rencor en tu corazón. Se trata de que en tus triunfos estén incluidos tus sueños; de si tus logros no hieren a tus semejantes. Es acerca de tu inclusión con otros, no de tu control sobre los demás.
Es sobre si usaste tu cabeza tanto como tu corazón, si fuiste egoísta o generoso, si amaste a la naturaleza y a los niños y te preocupaste de los ancianos. Es acerca de tu bondad, tu deseo de servir, tu capacidad de escuchar y tu valor sobre la conducta. No es acerca de cuantos te siguen si no de cuantos realmente te aman. No es acerca de transmitir, si no cuantos te creen si eres feliz o finges estarlo. Se trata del equilibrio de la justicia que conduce al bien tener y al bien estar. Se trata de su conciencia tranquila, tu dignidad invicta y tu deseo de ser más, no de tener más.
simplemente UNA RESPUESTA CON ESTILO !....
Abrazotes: el gato
Fue el Rey del Pop, vendió más discos que nadie (aún hoy no lo ha superado ningún otro artista), tuvo éxito profesional pero no personal. No hacía falta conocerlo personalmente para darse uno cuenta de que no era feliz y de que era un enfermo, que necesitaba mucha ayuda. En fin, descanse en paz.
Saludos.
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